Hace tiempo que no te digo nada y hoy me apetece hacerlo. Mi silencio también es debido a que estoy haciendo una formación profesional y me tiene muy ocupada porque estoy haciendo bastantes cambios; seguro que a ti también te ocurre, cada año somos diferentes al año anterior y necesitamos actualizarnos.
Hace veinte años que me dedico al feng shui y todavía me dicen: ¡Ah ¡ feng shui, es eso que cambian los muebles de sitio? Tengo que poner una ranita de tres patas, un gatito que mueve el brazo. En fin…, en Internet corre mucho desconocimiento.
Entre otras cosas Feng Shui es física Cuántica y se adapta a Leyes Universales.
Aparentemente en Feng Shui trabajamos en acciones externas y digo externas porque su influencia será interna (inconsciente), allí donde se cuece todo y desde donde de verdad suceden los cambios.
Con esas cualidades que tienen los 5 Elementos, simbolismos, situaciones de la vida empresarial y personal (Bagua) y todo lo demás, apalancamos la vibración necesaria para conseguir ESOS DESEOS.
En realidad el ser humano está capacitado para crear universos, pero todavía no lo sabe y el feng shui es una de las herramientas que tiene para acercarse.
Empieza por manifestar TUS DESEOS
Primero aprender a reconocerse YO SOY: Yo Soy verdad, Yo Soy salud, Yo Soy amor etc.
YO SOY
Decreta tu poder poniendo en tu espacio la vibración que corresponde al deseo.
Empieza a manifestar deseos pequeños.
También el Feng Shui tiene relación con la Ley de la Asunción porque pone énfasis en la emoción del deseo cumplido. Vivir desde la emoción del deseo cumplido, aunque todavía no ha aparecido en tu realidad terrenal.
Puedes poner el foco (pensamiento) en tu deseo, pero si no lo haces desde la emoción (vibración) en presente del deseo cumplido, no se va a manifestar Para conseguirlo hay que vivir desde la emoción que eso, ya es real.
No se trata de la ley de atracción. En el universo cuántico tu deseo ya existe, solo falta sentirlo (emoción) y lo verás manifestado en tu realidad.
Porque la a puerta de entrada al inconsciente no es el pensamiento, es la emoción.
En Feng Shui, hago énfasis en lo que se desea; en lo bueno, y colocar esa vibración en el lugar adecuado, repito. Una vez reconocidas las vibraciones negativas, van fuera.
YA SABES QUE TODO ES ENERGIA, LO QUE SE VE, Y LO QUE NO SE VE
Josefina Salvador
Deja una respuesta